Los extintores pueden desempeñar un papel fundamental en caso de emergencia. Sin embargo, es importante saber que no todos los extintores son iguales. Han sido creados específicamente para apagar incendios provocados por determinados tipos de materiales. Cualquier persona que deba utilizar un extintor debe recibir formación sobre el tipo de extintor que va a utilizar, así como sobre cuándo y cómo debe utilizarlo. Existen cinco tipos de extintores. Repasaremos cada uno de ellos.
- Los extintores de clase A funcionan con materiales ordinarios como papel, madera, tela; cualquier cosa combustible.
- Los extintores de clase B deben utilizarse en fuegos que impliquen líquidos inflamables y combustibles como gasolina, disolventes, combustibles, pinturas, grasa, etc.
- Los extintores de clase C se utilizan para fuegos eléctricos. Puede tratarse de un incendio provocado por un electrodoméstico, una herramienta o cualquier otro equipo que esté enchufado.
- Los extintores de clase D están diseñados para utilizarse con metales inflamables como el potasio o el magnesio. *Algunos extintores de Clase D pueden estar diseñados para su uso con un metal específico y deben ser investigados antes de su uso.
- Los extintores de clase K están diseñados para su uso en cocinas. Sirven para apagar fuegos de aceite o grasa de cocina.
Sepa siempre qué tipo de extintor hay en la zona y sobre qué se puede utilizar. Por lo general, esto se explica en el extintor y sólo debe utilizarse para ese fin. Si se utiliza en el tipo de fuego equivocado, el extintor puede no funcionar o incluso propagar las llamas.
Hay extintores que pueden utilizarse para más de un tipo de fuego, como los ABC. La clave es planificar con antelación para que la respuesta sea automática.